La nueva literatura argentina se expresa también entre las páginas de Sultana del Lago Editores, quien le abre un espacio en agenda editorial a un nuevo e importante aporte a nuestra literatura continental.
“Te cuento un mito” es el primer libro del escritor argentino Cristian Walter y nos trae una aventura para jóvenes y adultos que se mueve ágilmente por la imaginación clásica; y que revela un mundo de posibilidades y versiones entretenidas, para culturizarnos y darnos la oportunidad de aprender. Estará disponible en Amazon y Google Play Book a partir del mes de febrero de 2020 gracias a Sultana del Lago Editores.
Su autor ha respondido a nuestro cuestionario para darnos a conocer más de su personalidad e inquietudes intelectuales.
¿Cuál es tu nombre completo? ¿Te gusta tu nombre? ¿Por qué?
Mi nombre es Cristian Walter y me gusta; no sé por qué pero me gusta. Lo que me molesta a veces es tenerle que explicar a la gente que Walter es mi apellido y no mi segundo nombre.
¿Dónde naciste? ¿Hay algo del lugar donde naciste que lleves marcado en tu personalidad?
Nací en Rafaela (Argentina) y creo que toda mi personalidad está marcada por mi ciudad, desde la forma de hablar hasta la pasión por los colores de mi querido Club Atlético de Rafaela. Durante cuatro años estuve viviendo fuera de la ciudad por el estudio, y todas las personas que conocí en esa maravillosa experiencia me decían que yo era un defensor incondicional de mi ciudad, y tenían razón. Admito que no tenemos hermosos paisajes ni muchas actividades para hacer al aire libre, pero el sentimiento de pertenencia que me genera mi ciudad, mi tierra, es enorme. Lo mismo me pasa con mi país, por más que tenga miles de defectos siempre me voy a sentir orgulloso y feliz de haber nacido en Argentina.
¿En qué país del mundo te gustaría vivir y por qué?
Creo que no me gustaría vivir en ningún otro país que no sea Argentina (excepto algún caso extremo). Lo que si me encantaría es conocer todo el mundo ya que con mi esposa nos encanta viajar y nuestro sueño es visitar miles de países, ver sus monumentos, deleitarnos con sus paisajes, conocer sus culturas.
¿Qué estudiaste? ¿Cuál es tu verdadera vocación? ¿A qué te dedicas?
Tengo dos títulos: Bachiller en Ingeniería Química y Tecnicatura Superior en Industrias Alimentarias. Por suerte puedo trabajar en el tema que me gusta ya que soy operario en una Industria Láctea. Pero sin dudas mi gran vocación (desde siempre) fueron los libros. Siempre amé leer y desde hace poco me anime a lanzarme a este maravilloso mundo de la escritura que me llena de satisfacción.
¿Qué época de la historia de la humanidad admiras más? ¿Por qué?
Creo que la antigüedad, la época de la antigua Grecia y del Imperio Romano sobre todo porque es una era de la historia que lo tiene todo: miles de guerras con estrategas maravillosos, intrigas, complots, construcciones impresionantes que aún perduran hasta nuestros días; allí se forjaron los cimientos del pensamiento y de la palabra que luego florecieron por todo el mundo.
¿Qué figura histórica repudias?
A nadie. Creo que la vida es una constante toma de decisiones, a veces elegimos bien y a veces elegimos mal, pero no por eso debemos repudiar a alguien. Comprendo que hay personas que hicieron mucho daño a la humanidad hasta llevarla casi a su exterminio y sus actos son totalmente repudiables, pero no sé si podría decir que los odio.
¿Cuál es tu película y actor cinematográfico favorito?
Mi actor favorito es Robin Williams, una persona maravillosa que nos deleitó con sus fantásticas actuaciones, siempre entregándose al máximo para sacarnos una sonrisa. Existe una frase de él que es maravillosa: No importa lo que la gente te dice, las palabras y las ideas pueden cambiar el mundo. Y si bien no tengo una película favorita, una de las que más me gusta es Patch Adams ya que en ella nos muestra una visión de la vida maravillosa: ayudar al prójimo con alegría, solo así podremos mejorar el mundo.
¿Quién es tu músico preferido? ¿Cuál canción podría ser la banda sonora de tu vida?
Mi músico preferido es el gran Charly García. Si bien no comparto la forma en la que llevó su vida, como cantante es excelente. Uno de los íconos del rock nacional argentino que luchó contra la dictadura y la represión con unas canciones cuyas letras son alucinantes. Por eso una de las canciones que más me llegan al corazón es Los Dinosaurios que retrata un poco lo que fue la nefasta época militar en el país, donde la gente desaparecía todos los días. Sin embargo la canción tiene un tinte esperanzador cuando al final habla que todas las cosas “pueden” desaparecer (como una posibilidad) pero los dinosaurios (entiéndase como políticos, corruptos, militares) van a desaparecer (como una afirmación). Es sencillamente genial. Aunque todas sus letras son maravillosas.
¿Qué opinas del suicidio?
No lo comparto para nada; creo que siempre hay una solución para todo.
¿Qué cambiarías de tu personalidad?
Lo que menos me gusta de mi personalidad es que muchas veces me encierro en mí mismo y no comparto lo que me pasa, sobre todo si es algo que me molesta. Entonces acumulo bronca y cuando estalla pueda lastimar a la gente que tengo a mi alrededor. Debo aprender a transmitir mejor mis sentimientos.
¿Le temes a la muerte?
Sí, mucho. Me da terror pensar en qué sucederá después, si seguiremos vivos en otro lugar, si existe la reencarnación o si simplemente desaparecemos. Por eso trato de vivir disfrutando al máximo, haciendo lo que me gusta junto a la gente que amo.
Si tu vida tuviera propósito ¿cuál crees que sería?
Creo que el propósito de todos es dejar este mundo un poco mejor de cómo lo encontramos. Pero sin necesidad de hacer grandes obras ni de figurar en la sociedad; sino que cada uno desde su lugar y con cosas simples puede cambiar el mundo. Hay veces que solo basta una sonrisa o un ¿Cómo estás? Para hacer sentir bien al otro. Y si logramos eso ya hicimos mucho.
¿Cómo te describirías literariamente hablando?
Soy un autor apasionado, al que le gusta investigar a fondo los temas sobre los cuales escribo. Le dedico mucha pasión y creo que eso se ve reflejado en mis textos. Creo que mi prosa y mis herramientas literarias todavía no son tan buenas pero siempre busco mejorar, por eso estoy constantemente leyendo a grandes autores y realizando cursos para crecer y poder brindarme al máximo.
¿Crees que tu escritura tiene alguna utilidad?
Toda escritura tiene utilidad. ¿Se imaginan lo que sería un mundo sin la escritura? Yo no podría ni pensarlo. La escritura es tan necesaria como comer porque es el alimento del cerebro y el alma. Cuando uno lee un libro no solo interpreta palabras y deduce qué es lo que quiso decir el escritor; sino que se transporta a un mundo mágico, vive experiencias que jamás pensó vivir y encuentra una satisfacción enorme. Eso es maravilloso. Y sé que algunos dirán que no todo lo escrito es literatura, pero yo discrepo con esa gente. Yo creo que toda escritura es literatura; lo único que hay que saber diferenciar son los distintos tipos de literatura: la clásica, donde grandes autores nos brindan su prosa intachable; la popular, que abarca los temas de actualidad y generalmente son libros que se olvidan de un año para el otro; la informativa, que abarca los diarios, revistas, artículos de divulgación científica; la poesía, que nos embellece la vida con sus hermosas melodías; las novelas, que nos trasportan a mundos mágicos; y muchos géneros más. Lo importante es que no existe la mala literatura, sino que existe literatura para todo tipo de personas y si alguna vez un libro te decepcionó no lo deseches diciendo que es horrible, tan solo no era el libro indicado para vos.
¿Qué razón te motiva a escribir?
Lo llevo en las venas. Es como si por el interior de mi cuerpo corrieran litros de tinta en lugar de sangre. Cada vez que me siento a escribir es una satisfacción enorme; es una liberación de la mente. Tan solo me siento y dejo que mi mano se explaye todo lo que quiera (a veces tengo que ponerle límites porque se va mucho por las ramas). Escribir es una experiencia hermosa.
¿Qué sientes al ponerle punto final a una obra?
Alegría, mucha alegría. El hecho de terminar una obra no es ponerle punto final y listo, me olvido que existe. No, es mucho más que eso. Es ver tu esfuerzo, tu dedicación, tus esperanzas, todo tu amor plasmado en esas palabras. Es decirle a la criatura que creaste, alimentaste, viste crecer y guiaste en su vida, que de ahora en más debe seguir su camino, pero que vos siempre vas a estar ahí para ella. Poner el último punto no es el perfecto final, es el perfecto principio.
¿Qué es lo más difícil de ser un escritor?
Cuando uno ama lo que hace nada es difícil. Hay cosas que se pueden complicar y uno mismo tiene que poner mucho de sí, mucha dedicación y esfuerzo, pero si lo hace con amor y pasión nada es difícil. Pero si tengo que elegir algo que a mí me resulta más complicado es la corrección. Me cuesta mucho volver a leer mis textos y ser autocrítico, y mucho más me cuesta eliminar partes o cambiar algo de la obra. Por suerte tengo a mi esposa que es mi gran crítica literaria.
¿Cómo descubriste que serías escritor?
Pregunta difícil. Creo que siempre lo sentí pero no me animaba a decidirme. Recuerdo que la primera novela que escribí ya la tenía totalmente pensada en mi cabeza, tenía todo listo: los personajes, los diálogos, los escenarios, la resolución. Pero no me animaba a escribirla. Entonces una noche se lo comenté a mi esposa y fue ella la que me insistió en que me animara, fue ella la que me dio el empujón que me faltaba y por eso estoy enormemente agradecido porque gracias a ello me pude sumergir en este maravilloso mundo de la literatura.
¿Tienes alguna rutina a la hora de escribir?
No, y eso que soy un hombre bastante estructurado y me gusta llevar una rutina de todo. Sin embargo, con el trabajo, la familia y los demás quehaceres no puedo establecer una rutina de escritura. Sin embargo, trato de aprovechar cada momento para dedicar aunque sea algunos minutos a las letras.
¿Qué te inspira?
Todo. Una imagen, una canción, una persona, una frase, un sueño. Todo lo que me rodea es una inspiración. Y sin dudas mi esposa, ella es la inspiración de mi vida.
¿Cuáles son los escritores o libros que más te han influenciado para escribir?
Leo mucha literatura clásica, por lo que creo que mi escritura viene influenciada por esos lados, sobre todo los escritores ingleses de misterio (con Arthur Conan Doyle y Agatha Cristhie como máximos exponentes del tema). También tengo una marcada influencia del escritor argentino Eduardo Sacheri, cuyos cuentos de fútbol me enseñaron mucho.
¿Con cuál libro te iniciaste en el hábito lector?
Comencé a leer un día que una amiga de mi mamá me regaló una historieta de Asterix y Óbelix que sus hijos no leían más. Desde ahí mi fascinación por ese mundo antiguo fue en aumento. Devoraba una historieta tras otra, hasta que dejaron de conseguirse ejemplares debido a problemas entre el autor y la editorial, o eso creo. Entonces comencé con la literatura juvenil de los grandes clásicos. Recuerdo que devoré los 40 libros de la colección grandes autores de la revista Genios en tan solo un verano. Y cuando termine quedé huérfano de nuevo. Entonces un día, en una tienda de canje, encontré dos libros que me cambiaron la vida: La Ilíada y La Odisea de Homero. Eran los primeros libros de literatura clásica que leía y me abrieron la cabeza a un mundo nuevo, lleno de aventuras espléndidas. A partir de allí devore toda la literatura que encontré a mi paso.
¿Cuál es tu libro favorito y por qué?
Sin dudas mis libros favoritos son los dos nombrados anteriormente (La Ilíada y La Odisea) porque fueron los primeros que llegaron a mi mente; pero también soy un gran fanático de las aventuras de los detectives Sherlock Holmes y Hércules Poirot.
¿Cómo ves el panorama literario en Latinoamérica hoy día?
La literatura latinoamericana siempre se vio unida por una raíz común que radica en su lengua materna: el español. Pero la gran diversidad de pueblos que integran Latinoamérica (con sus diferentes culturas, tradiciones, expresiones y costumbres) ayudan a conformar una literatura única en el mundo, llena de riquezas y pasiones (porque los latinos somos muy pasionales). Creo que hoy en día existe una enorme cantidad de autores latinoamericanos de gran nivel, que a través de las nuevas tecnologías pueden llegar con sus obras a partes del mundo que antes eran impensadas. Y esto me llena de esperanza para un futuro donde podamos crear una literatura fuerte que enlace a todos los pueblos latinoamericanos pero sin distorsionar las raíces únicas de cada país.
¿Qué libro le recomendarías leer a Dios?
Creo que el libro que le recomendaría a Dios (y a todo ser viviente) es sin dudas El Principito. Es un libro excelente, lleno de profundas observaciones sobre la vida y la naturaleza humana. Es un libro que puede leerse en distintas etapas de la vida y siempre encontraremos significados diferentes. Es maravilloso. Creo que Dios debería tenerlo en cuenta para comprobar que la humanidad no está perdida; y creo que los humanos deberíamos tenerlo en cuenta para no perdernos en nuestra propia humanidad. Pues recuerden lo esencial es invisible a los ojos.
¿Qué libro le recomendarías al presidente de la república?
Sin dudas le recomendaría leer “Amo y servidor” de Lev Tolstói. Es un cuento fantástico, cargado de una intensidad que no nos permite soltar el libro en ningún momento. El escritor despliega con suma maestría los sentimientos y pensamientos de los personajes y la forma de actuar cada uno frente al peligro. Y al final nos deja una moraleja sobre lo que es correcto, porque el cuento juega con la idea de que el rico, en busca de más y más riquezas, arrastra al pobre hasta la destrucción de ambos; pero al final el amo se redime y da la vida por su servidor. Creo que esto es fantástico y sin dudas es lo que debería aprender el presidente de cualquier país, ya que él está al servicio del pueblo y tiene que buscar lo mejor para el mismo, y no al revés.
¿Quién es el escritor contemporáneo que recomendarías leer?
No creo poder recomendar a un solo escritor, hay muchos y muy buenos. Todo depende del gusto de cada uno y de lo que cada persona busca al leer. Ejemplos se me ocurren muchísimos y muy diversos. Si buscan novelas con una trama de misterio excelente les recomiendo leer a Claudia Piñeiro, Patricia Cornwell o Robin Cook (estos dos últimos mostrando un nivel impresionante en la materia de la medicina forense y de los avances tecnológicos en la medicina en general). Ahora si quieren temblar de miedo les recomiendo la prosa endemoniada del maestro indiscutible del género: Stephen King. Si por el contrario son más futboleros les recomiendo las novelas y cuentos de los inigualables Fontanarrosa y Sacheri, cuyos escritos dibujan a la perfección el mundo de la pelota y sus alrededores. En definitiva hay un montón de autores y libros excelentes, mi recomendación es que lean, lean y lean. Y no se queden solo en su zona de confort leyendo solo los géneros que les gustan; sino que lean todo tipo de literatura. La riqueza que obtendrán será enorme.
¿Qué libro o libros no has podido terminar de leer?
Hay libros muy tediosos o que tienen un vocabulario muy pesado y por lo tanto resultan muy engorrosos para leer, pero siempre traté de terminarlos porque siento que algo me enseñaron. Solo hay unos pocos libros que no termine le leer porque presentaban un lenguaje muy procaz, casi rayando con lo vulgar, y solo se dedicaban a exaltar la sexualidad. Sentía que estos libros no eran para mí y por eso los dejaba a un lado.
¿Tienes algún mensaje para los jóvenes que se inician el camino de escritura?
Que no tengan miedo a escribir. Que no dejen que nadie les robe la ilusión de cumplir sus sueños. Que no se desanimen y sigan apostando siempre por sí mismo. Que no se tomen esto a la ligera; no hay que olvidarse que exige mucha dedicación y sacrifico. Y que no se olviden la frase del gran Isaac Asimov: Puede ser que usted no sea escritor. No es una desgracia. Siempre le queda la posibilidad de dedicarse a alguna profesión ligeramente inferior como la cirugía o la presidencia de Estados Unidos. No será lo mismo, por supuesto, pero no todos podemos ascender a las alturas.
¿Antes de morir, qué logro en literatura quisieras tener?
Ninguno en especial, soy feliz escribiendo y para mí ya es un logro enorme que aunque sea una persona lea alguno de mis libros y le guste.
¿Has tenido alguna experiencia erótica (excitación) con la lectura? ¿Qué libro?
No, no me gustan los libros que abordan esa temática. Incluso si un libro se vuelve muy explícito o vulgar con ese tema prefiero pasar las páginas o directamente dejar de leerlo.
Si escribieras como un pintor ¿qué pintor serías?
La verdad es que me considero bastante ignorante en el tema, debo confesarlo. Sin embargo creo que si escribiera como un pintor sería Picasso. No, bajo ningún punto de vista coloco mis humildes obras a la par de las genialidades de ese gran pintor. Lo que quiero significar es que, al igual que Picasso, soy un escritor muy versátil que puede escribir sobre varios géneros sin sentirse incómodo con ello.
¿Cuál es tu personaje de ficción favorito? ¿Por qué?
Una pregunta muy difícil porque tengo dos en carpeta, pero creo que me voy a decidir por Sherlock Holmes. Creo que es un personaje único, lleno de misterios y herramientas tan versátiles que lo hacen ser el mejor detective de todos los tiempos. Si bien tiene aspectos de su personalidad que son repudiables (egocentrismo, afición a las drogas, locura latente, mal genio) y que en incontables situaciones castiga duramente a su fiel amigo Watson por su ignorancia, en el fondo es una gran persona, llena de cariño y dispuesto a dar todo por su amigo.
¿Qué persona o situación de la vida real crees que merece convertirse en literatura?
Creo que cualquier persona o situación puede convertirse en literatura; es la pluma y el talento del escritor lo que transforman una situación o una persona, que a priori son ordinarias, en un texto literario magnífico.
¿Qué opinión te merece Sultana del Lago Editores?
Esta es la primera vez que trabajo con esta editorial y es nada más y nada menos que para publicar mi primer libro… Estoy totalmente agradecido por la confianza que depositó en mí y en mí obra. Además estoy feliz por la profesionalidad de las personas que trabajan allí y por cómo tratan a los autores ya que desde el primer momento me hicieron sentir a gusto. Solo tengo palabras de agradecimientos para con esta editorial.
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