Sultana del Lago Editores

Editorial Independiente de Venezuela

Poemas de UN SUEÑO ARDE EN MI MEMORIA de Ender Romero

DOLORIDOS CORTEJOS

Doloridos cortejos
Pueblan mi sueño
Ráfagas de memorias milenarias
Barren este desierto de sombras.

¡Qué atroz desfile de difuntos!
¡Qué sonar de huesos en el tiempo!

Sólo el mar no tiene olvido
Y reviste de algas infinitas
Su oscilar de nueve cantos en la noche.


SAUDADE

Este espacio de la noche
Columbra de sombras
Los vaivenes del sueño
Hay músicas lejanas
Ladridos acosan
Fantasmas asustados.

Una luz titila
En el cortado horizonte.
Despejando la angustia
De insomnio de siglos.


NO SOY YO

Desfallezco…
Me sugiero desfallecer
Sobre el camino
Polvo, sombras, nieblas
Sobre mí
Dejándome vacío

Desfallezco…
Espacio de la noche
Profundidad
De corola vacía
Sin abejas ni colibríes.

Desfallezco…
Ya no soy yo sino camino
Fatigando mis pasos
Sobre las mismas huellas.


OLVIDO

No sé qué fiero descalabro
Asola esta casa en ruinas .

Han partido ya los últimos testigos
Y el tiempo repliega
Restos de memorias
A sórdidos rincones.

Recorro a tientas
La inercia de estas piedras
Removiendo el agua
Dolorida de los días.

Un velo de olvido
Se acumula en las ventanas
Y una flor de ayer
Muere lentamente en el jardín.


UN SUEÑO ARDE EN MI MEMORIA

Perdido entre sueños
Un sueño
Arde en mi memoria.
Su fuego es luz
Que no se consume
Y vierte la savia
Enajenante de la angustia.
Yo soy enloquecido
Sitiador de sus contornos
Alacrán enfebrecido
Hirviendo su veneno.
Me muevo a su alocado compás
En su danza de vértebras torcidas
En su lúbrica esperanza.
En mí es el aguijón
Acicate de espectros
Que pueblan los caminos
Desgarran los cantos
Y borran las huellas
De un diálogo antiguo
Del hombre con su dios.
No sé cómo nació
Ni como vino a mí
A hospedarse suplicante
En el hondo universo de mis sueños.
Sólo sé que cuando aliento
Un poco más de vida más allá
Atiza su fuego, renace de su brasa
Y lo siento arder en mi memoria.
Micro biografía